¿Qué hay detrás de una campaña digital exitosa? Sí, una gran idea, una idea desarrollada por un buen equipo creativo. Lamentablemente son muchas las buenas ideas que se quedan sólo en eso, en buena creatividad. Y es que a veces se nos olvida que la labor de una agencia no es generar buenas ideas, sino comunicarlas.
En muchos casos todo el trabajo estratégico que hay detrás de un mensaje no se toma en cuenta o, más bien, no se aprecia tanto como la creatividad que existe en torno a una determinada campaña.
El rol de un estratega en una agencia es, y siempre ha sido, un papel clave para que el mensaje llegue a quien debe llegar. Es en las agencias y áreas digitales donde su importancia se afianza más, donde su responsabilidad no acaba con el lanzamiento de la campaña; sino que será él quien tomará las decisiones durante su duración en función de los resultados obtenidos diariamente.
Todos los recursos digitales – contenidos, creatividades, formatos, planificación de medios, influencers…- son susceptibles de ser modificados y optimizados desde el primer día, a diferencia de los recursos ATL. ¿Si un spot no genera los resultados esperados lo eliminas y grabas otro? Obviamente no, sobre todo porque su medición depende de un trabajo estratégico a medio-largo plazo. Medición que para un estratega digital es accesible desde los primeros minutos de arranque.
No es, ni mucho menos, la estrategia más importante que la creatividad; pero al contrario tampoco. No se trata de quien vaya primero, sino más bien, se trata de olvidar las jerarquizaciones en los procesos de trabajo de las agencias.
Las posibilidades en digital se amplían y se renuevan día a día y es responsabilidad del planner conocer estas opciones y transmitírselas al creativo desde el inicio de una conceptualización. Es responsabilidad del creativo trabajar bajo las mediciones obtenidas por el planner en el día a día de campaña.
Todo es inmediato, por lo que el trabajo de ambos también debe serlo.